Salud

En Rosario la operación al Rifle Castellanos por cáncer de próstata disparó las consultas medicas sobre el tema

Tanto en el sector público como privado de la salud advirtieron un aumento de chequeos por parte de los varones. ¿Quiénes tienen más riesgo de enfermarse? ¿A qué edad y qué estudios hay que hacerse?

La operación al Rifle Castellanos por cáncer de próstata disparó las consultas en Rosario

“Jamás imaginé una repercusión de este tipo porque hubo muchísima gente que me llamó, me escribió, pero sobre todo gente que tomó conciencia del problema. Es más, muchos me contaron que a partir de lo mío se fueron a hacer un control. Todo eso me alegró mucho porque quiere decir que lo que me pasó al menos sirvió para algo”. Las palabras de Hernán “Rifle” Castellanos, publicadas esta semana en una nota en Ovación, resumen lo que el ex jugador de Rosario Central y actual entrenador de arqueros, sintió a pocos días de haber recibido el alta por una intervención quirúrgica, a raíz de un cáncer de próstata.

Este diario consultó a distintos urólogos de la ciudad, tanto del sector público como privado de la salud, quienes confirmaron que efectivamente en las últimas tres semanas, al hacerse público el problema de salud de Castellanos, notaron un incremento importante de consultas de varones, sobre todo de mediana edad.

Pablo Weiss, médico urólogo y jefe de servicio de urología de Grupo Gamma, miembro del comité de tumores del Hospital Privado Rosario, fue quien hizo el diagnóstico del ex arquero canalla y confirmó a este diario que se notó un incremento de visitas a los consultorios de los especialistas a partir de la situación de Castellanos.

“Esto sucede cada vez que una persona pública tiene un diagnóstico de estas características. También me pasa que cuando un paciente está en tratamiento por cáncer de próstata, en los días siguientes a la noticia, los diez amigos del club o compañeros de trabajo vienen corriendo a hacerse el chequeo. No está mal, pero lo esperable desde el punto de vista sanitario es que haya campañas continuas para que no sean sólo cosas esporádicas. Porque después de que pasa el momento sensible, los controles se cortan”, dijo.

“No hay excusas para que un varón que vive en Rosario o su zona no se haga los controles de próstata. Ya sea en la salud privada o en la pública, los chequeos deben hacerse. En el sector público hay excelentes profesionales y se cuenta con los recursos para estos estudios”, enfatizó Weiss.

El médico comentó que según la Sociedad Americana de Urología los controles para detectar en forma temprana el cáncer de próstata deben hacerse a partir de los 40 años y que la Sociedad Europea de Urología los recomienda desde los 50. “Por mi experiencia, y no por quedar bien con ambas entidades, a las que pertenezco, es que se realicen desde los 45 años. En mi trayectoria de cuatro décadas no he tenido pacientes menores a esa edad con este cáncer, salvo contadísimas excepciones. Por supuesto, si el hombre tiene un abuelo, padre o hermano con este diagnóstico, o incluso una madre o hermana con cáncer de mama a edad temprana (porque en esos casos puede tratarse de un tipo de cáncer hereditario familiar) debe iniciar los controles antes de los 45”, mencionó.

“Lo que quisiera decirles a los hombres es que se trata de dos estudios muy simples. Un análisis de sangre y el tacto rectal. Este último control es el que genera más fantasías y mitos. Y la realidad es que es algo fugaz, simple, que se hace en apenas algunos segundos y no tiene ninguna consecuencia. Lo que me apena más es que todavía hay urólogos que le dicen al paciente que el tacto no es necesario. Eso me parece terrible. Las dos cosas son fundamentales para un diagnóstico precoz, que puede salvar la vida de esa persona”, remarcó Weiss.

Lelio Zeno, médico urólogo, jefe de Urología del Sanatorio Parque y del Hospital Centenario y profesor universitario también confirmó la tendencia a una mayor cantidad de consultas que se dio a partir de la enfermedad de Hernán Castellanos. “Si le ocurre a un famoso, sea jugador de fútbol, político o artista, los varones abren los ojos y vienen al médico, si no, no se controlan casi nunca”, destacó.

Zeno hizo hincapié en que son dos los métodos los indispensables para saber si hay alguna alteración en la próstata: el análisis de antígeno prostático específico (PSA) y el tacto rectal que justamente permite palpar la superficie de la próstata ubicada en la parte anterior del recto. “Sólo la combinación de ambos es válida para el diagnóstico”, remarcó el especialista, y agregó: “He tenido pacientes con cáncer de próstata a los que el análisis PSA les daba bien”.

Respecto a la sintomatología, el médico comentó que el cáncer de próstata no da señales hasta que no está avanzado o hay metástasis. “Por eso son tan valiosos los controles”.

El cáncer de próstata se puede tratar con fines curativos cuando no hay metástasis o afectación ganglionar, en los demás casos existen terapias (y hay algunas muy nuevas que mejoran la calidad de vida y prolongan la vida) pero ya se lo piensa como una enfermedad más del tipo crónica.

Algunos “errores”

María Malén Pijoan, especialista en Urología y en Andrología y doctora en medicina, miembro del Grupo Oroño y directora del Instituto Metropolitano de Urología reconoció que no sabía exactamente qué le había ocurrido a Hernán Castellanos y que se enteró justamente en las últimas semanas por la cantidad de varones que llegaron con cierta preocupación a la consulta médica y lo mencionaron. Comentó también que muchos lo hicieron a instancias de sus parejas mujeres, que los alentaron a visitar al urólogo o uróloga después de lo que le ocurrió al ex jugador. “Es interesante que vengan más pacientes pero nunca que se genere como una psicosis”, destacó.

Para la médica, “aunque parezca mentira muchos hombres ni siquiera saben qué es la próstata. Unos dicen que es un órgano que produce hormonas, otros lo relacionan con el sistema urinario, cuando es la glándula que produce la mayor parte del líquido seminal. Ese desconocimiento demuestra que no tienen mucha conciencia sobre el tema y menos sobre los chequeos necesarios”.

La especialista también comentó que muchos hombres están convencidos de que con el análisis PSA negativo, ya está todo bien y eso es erróneo.

Más allá de la relevancia de la detección temprana, señaló: “Quiero destacar es que si el cáncer fue diagnosticado, actualmente hay muchas terapias para abordarlo, que apuntan más que nada a la calidad de vida. Las nuevas drogas, por ejemplo, se enmarcan en lo que llamamos medicina personalizada, y es una buena noticia. Pero sin dudas, encontrar el problema a tiempo es fundamental”.

Respecto de las terapias, comentó que “pueden afectar la salud sexual y reproductiva y por eso es importantísima la comunicación médico-paciente para encontrar el mejor camino para cada persona”.

“Hoy tenemos que informar que todo tratamiento tiene sus consecuencias. Por eso actualmente se habla de salud masculina, y ya no de paciente oncológico. Existen muchas opciones para tratar esas consecuencias también. En ese sentido puntual, el panorama es más alentador que hace algunos años”, enfatizó. Fuente : La Capital